Las manchas en la piel, o también llamadas hiperpigmentaciones, son en general producidas por un aumento de melanina en la piel.
Las causas más frecuentes de consulta por manchas en la piel son:
Lentigos solares:
Están asociados directamente con daño solar, por lo cual aparecen en zonas de piel expuesta (rostro, escote, dorso de manos) después de los 40 años.
Melasma:
Localizado en frente, región malar o bozo. Es producto de la exposición a radiación ultravioleta en mujeres predispuestas por factores hormonales (embarazo y anticonceptivos orales).
Hiperpigmentación postinflamatoria:
Se produce después de algún proceso inflamatorio como acné, picaduras, quemaduras, entre otros.
¿Cuáles son las causas más comunes?
Existen diversos factores que favorecen la hiperpigmentación, entre ellos:
- Exposición solar
- Predisposición genética
- Edad
- Factores hormonales
- Inflamación cutánea
¿Cómo podemos prevenirlas?
Para evitar su aparición o que se acentúe el color, es importante evitar la exposición solar sin protección.
En el caso de la pigmentación postinflamatoria, la escoriación (rascado), genera más inflamación de en consecuencia más mancha.
¿Qué tratamientos se pueden realizar y en qué época del año es más recomendable?
Existen diversos tratamientos para mejorar estéticamente las manchas. La elección del método dependerá del tipo de mancha, fototipo del paciente y superficie cutánea comprometida. Se pueden utilizar cremas despigmentantes, peeling, crioterapia o luz pulsada.
Los tratamientos estéticos de manchas se realizan durante los meses de invierno y siempre se deben complementar con protección solar.
Servicio de Dermatología