Oncología Radiante

El Servicio de Oncología Radiante del Hospital Hospital Privado de Comunidad, es un Servicio que ha sido inaugurado en 1991 con unidades de telecobaltoterapia. Ha ido renovando y ampliando sus recursos técnicos hasta la dotación actual con un Acelerador Lineal Dual con diversas energías de fotones y electrones, un moderno sistema de planificación virtual, Tomógrafo para obtención de imágenes para planificación y simulación de tratamientos, todo ello conectado a través de una red de gestión instrumental, que garantiza la seguridad y fiabilidad de los tratamientos radioterápicos.

Trabaja en relación con la Unidad de Radiofísica Hospitalaria, responsable de la dosimetría individualizada del tratamiento de cada paciente. El servicio cuenta con muchos años de experiencia y la mejor tecnología. Este hecho, unido a una atención muy humana, permiten llevar a cabo tratamientos de calidad.

Al requerir el cáncer un tratamiento multidisciplinario, este Servicio colabora con todos los servicios médicos y quirúrgicos del HPC implicados en diagnóstico y tratamiento oncológico, así como en la participación de comités interdisciplinarios, que garantizan la mejor calidad de los tratamientos ofrecidos.

La Terapia Radiante (Radioterapia)

La Radioterapia es el tratamiento con radiaciones ionizantes utilizado en oncología. Es muy útil en el control a largo plazo de muchos tumores, como los de mama y próstata, los más frecuentes. Así como también se utiliza en el tratamiento de tumores de cabeza y cuello, pulmón, recto, tumores ginecológicos, canal anal, sarcomas,linfomas, etc. Puede utilizarse con intención curativa, sola o asociada a otras modalidades terapéuticas, aportando mejor control local de la enfermedad y mejorando la supervivencia global.

Junto a las otras terapéuticas oncológicas, como son: cirugía, quimioterapia, hormonoterapia, inmunoterapia y nuevas dianas moleculares, la radioterapia forma parte fundamental del arsenal terapéutico para la lucha contra la enfermedad neoplásica. Entre un 60 y un 75% de pacientes diagnosticados de cáncer, necesitarán tratamiento con radioterapia en momento de su enfermedad. Además, puede utilizarse con intención paliativa, y su repercusión sobre el control de síntomas la sitúan entre las alternativas más útiles para muchos pacientes.

Los Tratamientos

La Oncología Radioterápica, de la misma manera que otras especialidades médicas de base tecnológica, está sometida a cambios continuos que dependen de los adelantos del momento. El objetivo final de la incorporación de nuevas tecnologías en el campo de la radioterapia es poder suministrar una dosis superior u óptima de radiación a las células tumorales, sin ver incrementados de forma significativa o intolerable los efectos secundarios sufridos por los tejidos sanos del paciente, consiguiendo de esta manera una ganancia en los resultados terapéuticos.

La evolución en las técnicas de imagen y en la informática, han producido avances muy importantes en las dos últimas décadas, que han sido rápidamente adoptadas por la oncología radioterápica moderna en las diversas facetas que integran el proceso de tratamiento.

Las diversas Técnicas de tratamiento con Radioterapia incluyen:

Radioterapia Tridimensional Conformada : Técnica de radioterapia externa que utiliza imágenes anatómicas tridimensionales (3D), generalmente obtenidas mediante un tomografo (TAC), para poder definir de forma más precisa las zonas a irradiar y utilizar toda la información disponible para realizar el cálculo de la dosis de manera tridimensional. La dosis de radiación se administra de manera homogénea dentro del tumor y con la mínima incidencia fuera de él.

Radioterapia de Intensidad Modulada : La Radioterapia de Intensidad Modulada (IMRT) permite irradiar tumores con un mínimo daño al tejido sano. La reducción del volumen de tejido sano expuesto a dosis altas de irradiación es su principal ventaja, lo cual nos permite la escalada de dosis en el tumor con menos toxicidad, tanto aguda como crónica. Este avance es posible gracias a la modulación de dosis con la que se consigue que la intensidad de la radiación sea diferente según zonas predefinidas previamente (en la planificación del tratamiento). Esta técnica se suele realizar con un acelerador lineal o dispositivo guiado por un complejo sistema informático que calcula la dosis y permite el control de los haces de radiación que inciden en la zona a tratar.

Está especialmente indicada para tumores de la regiones de cabeza y cuello, cáncer de próstata, tumores en edad infantil, re-irradiaciones, determinados tumores de mama, y otras localizaciones.

Radiocirugía Cerebral Estereotáxica: Es una técnica de tratamiento que se emplea en los tumores cerebrales, en una sola sesión. Su aplicación es de gran precisión y de una eficacia estimada en un 85-95%. Consiste en colocar una guía estereotáxica para la localización tridimensional de la zona a tratar y en aplicar haces muy finos de radiación desde múltiples puntos externos con gran exactitud para que la energía sea lo suficientemente alta en la zona a tratar.

La Radiocirugía Estereotáxica se caracteriza por la localización de lesiones intracraneales de una manera precisa y exacta, con lo que logra aplicar altas dosis de radiación a los tumores y una caída brusca de la dosis fuera de la lesión, por lo que disminuye la dosis en los tejidos sanos circundantes. Está indicada no sólo para tumores primarios o metastásicos, sino también para tumores benignos (meningiomas, neurinomas) y para malformaciones vasculares que, por su localización, puedan ser de peligroso o difícil abordaje quirúrgico. Es un tratamiento incruento e indoloro para el paciente que no requiere incisión, ni anestesia. Carece del riesgo de las complicaciones derivadas de la cirugía abierta tradicional y se realiza de forma ambulatoria.

Braquiterapia: Es una técnica de tratamiento mediante la que se introducen las fuentes de irradiación en el órgano a tratar. Particularmente importante en el manejo de tumores ginecológicos como el cáncer de cuello uterino y endometrio.


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