Javier Lobo, Silvina Devoto, Federico Hazan, Gustavo Chiodetti
Rev HPC ; :
INTRODUCCIÓN
El bloqueo del ganglio estrellado se utiliza como diagnóstico y tratamiento de distintas condiciones dolorosas asociadas a los nervios simpáticos.
La enfermedad coronaria es tema de interés de la anestesiología en la práctica diaria en general y en particular en la anestesia cardiovascular. La mayoría de los enfermos coronarios responden a los tratamientos médicos o quirúrgicos instituidos; sin embargo una minoría tiene una respuesta insuficiente a los tratamientos bien establecidos y probados. El bloqueo del ganglio estrellado (BGE) aparece como una propuesta en el tratamiento coadyuvante para este grupo de pacientes que presentan un importante deterioro en su calidad de vida1,2.
CASO
Un varón de 76 años tenía antecedentes de dislipemia, hipertensión arterial, vasculopatía periférica, cardiopatía isquémica crónica y angioplastia en 1994. La última cinecoronariografía mostró enfermedad de tres vasos con malos lechos distales, descartándose realizar procedimientos de revascularización. Requirió dos internaciones por angina inestable en el último año. Durante el último mes presentó angina clase funcional (CF) IV según la Sociedad Canadiense de Cardiología.
Recibía atenolol, clopidogrel, dinitrato de isosorbide, aspirina, estatinas y clonazepam.
Dado que continuaba sintomático se le propinó el bloqueo del ganglio estrellado.
MÉTODO
El procedimiento fue realizado en el quirófano del Hospital Privado de Comunidad bajo control de tensión arterial, frecuencia cardíaca, electrocardiograma y oximetría de pulso.
Se colocó al paciente en posición supina con el cuello extendido, se palpó el tubérculo de la sexta cervical, lateral al cartílago cricoides del lado izquierdo. Entre la tráquea y la carótida se introdujo una aguja calibre 21G hasta hacer contacto con el proceso transverso de la sexta cervical. Retirando la aguja uno a dos milímetros se inyectaron 15 ml de bupivacaína al 0,5%. La efectividad del bloqueo se constató con el desarrollo de un Síndrome de Horner.
RESULTADOS
Los datos fueron tomados en forma retrospectiva en base al interrogatorio de la paciente como promedio de los 30 días previos del BGE y durante el seguimiento a partir de una semana posterior al BGE (tabla 1).
SEGUIMIENTO
Cuatro meses después del BGE, progresivamente aumentaron la frecuencia e intensidad de los episodios anginosos. Se repitió BGE, recuperando la mejoría alcanzada en la primera oportunidad. Aproximadamente 100 días después del segundo BGE, nuevamente reaparece la sintomatología que responde a un tercer BGE, logrando recuperar la capacidad funcional durante un período de cuatro meses hasta la fecha.
CONCLUSIONES
El BGE es una alternativa a tener en cuenta en este tipo de pacientes, permitiendo mejorar la calidad de vida mediante un procedimiento relativamente sencillo, de bajo riesgo y bajo costo, y por períodos relativamente prolongados.
Se necesitarían estudios randomizados a doble ciego para confirmar los reportes clínicos actuales, en los que se encontró una franca mejoría, para de esta manera determinar la efectividad del procedimiento.
BIBLIOGRAFÍA
1. Salas Herrera I, Huertas Garbet L. BGE en el tratamiento de la angina de pecho refractaria; un posible tratamiento coadyuvante. Rev Costarric Cardiol 2002; 4: 33-5.
2. Chester M, Clarke H. Long term benefits of stellate ganglion block in severe chronic refractory angina. Pain 2000; 87:103-5.
Tabla 1. Promedio de los 30 días previos del BGE y durante el seguimiento a partir de una semana posterior al BGE.
BGE Antes Después
Clase funcional (CCS) IV II
Número de Isordil/día 15 a 25 3 a 5
Sueño Alterado Conservado
(no dormía
por dolor)
Actividad diaria Prácticamente Levemente
nula disminuda
Intensidad del Angor 10/10 2-3/10