
Actualmente estamos atravesando una realidad compleja, marcada por la incertidumbre, lo que trae aparejado diferentes respuestas subjetivas. Una pregunta recurrente es cómo ésta situación afecta a los niños. Los posibles efectos del aislamiento social serán visibles a futuro, pero hoy es fundamental la observación por parte del adulto frente a las diferentes respuestas que un niño pueda dar.
Los niños no suelen expresar con palabras lo que les sucede, es por ello que hay que estar atentos a sus manifestaciones y comportamientos como berrinches, inestabilidad emocional, miedos, conducta demandante y/o desafiante, actitudes regresivas. Estas posibles respuestas son la expresión de la ansiedad y angustia ante el contexto que estamos viviendo.
¿Cómo sobrellevar la realidad cotidiana?
- Es importante encontrar espacios de participación familiar incluso la realización de tareas domésticas.
- El juego constituye un gran aliado para el despliegue de las emociones. Es importante brindar espacios creativos y ordenados.
- Mantener el contacto virtual con sus amigos es fundamental para el desarrollo de los niños. El uso responsable de los canales virtuales de comunicación puede ayudar a sostener los lazos de amistad del niño.
La crianza de los hijos en este contexto de aislamiento puede generar estrés en los padres. Es importante que identifiquen sus emociones y ellas no interfieran en el mensaje que desean transmitirles.
“Escuchemos para poder escucharlos”.
Sección Infantojuvenil del Servicio de Psiquiatría y Salud Mental HPC